Escrito Por: Katherine Giraldo
El artículo de hoy, surgió gracias a la pregunta de una gran lectora de este blog 🙂 A ella le inquietaba saber cómo podía liberar su interior específicamente del Rencor.
De mi parte realmente no podía obtener una respuesta certera, porque me encontraba en medio del mismo interrogante.
Pero bueno, tras varios días de investigación, hoy sé la respuesta… Que aunque parecerá simple en principio, tiene el suficiente poder en su esencia como para cambiar tu vida y la mía. Así que, Préstame atención 😉
Las emociones, son el resultado frente a determinados estímulos provenientes del ambiente o el entorno que nos rodea, y hasta de nosotros mismos.
De esta manera, hay emociones positivas y negativas (Ya que un estímulo puede ser positivo o negativo).
Por ejemplo, podríamos decir que la satisfacción y la comodidad son emociones positivas que aparecen cuando estamos acompañados de personas agradables (a nuestra percepción) que impulsan nuestro bienestar.
Así mismo, una emoción negativa podría ser la ira y el sentimiento de desconfianza que surge cuando alguien nos ha hecho daño o simplemente ha ido en contra de eso que percibimos como correcto.
Por otro lado, una de las características más trascendentes de las emociones, es que logran alterar nuestra atención, modifican nuestras conductas y refuerzan caminos neuronales en nosotros, al mismo tiempo que activa redes asociativas relevantes a la memoria.
Esto hace que las emociones positivas perduren en nuestro ser haciéndonos felices (por ejemplo con el amor hacia la pareja), y que igualmente las negativas permanezcan destruyéndonos día tras día (por ejemplo cuando odiamos a alguien).
Sin embargo, aunque las emociones tanto positivas como negativas tienen tan fuerte impacto en nuestra mente y terminan afectando nuestro ser; las emociones negativas tienen principalmente una manera de ser desarraigadas de nuestro corazón: Por Medio Del Perdón.
Y No, Perdonar No Es Tan Simple Como Siempre Te Lo Han Hecho Creer.
Muchos se jactan diciendo que saben perdonar, que es cuestión de tiempo para que sanen las heridas que tenemos en el corazón… Y no, no dudo que el tiempo sane heridas, pero esto es meramente Físico. De tu corazón y de tu mente, o te encargas tú, o dejas que tu veneno interno crezca cada día más.
Como dice el viejo adagio:
Errar es Humano. Perdonar es Divino.
— William Shakespeare
El perdón y el autosabotaje o autoengaño, son cosas muy diferentes. El cualquier momento podrás pensar que has perdonado a alguien, o a ti mismo cuando has cometido un error y te has decepcionado; pero ¡Ten cuidado!, puedes estar engañándote a ti mismo y con ello, logrando que tus emociones negativas se aumenten mucho más.
Entonces, como es tan fácil caer en el autosabotaje creyendo que estamos perdonando, tengo para ti las siguientes evidencias de un verdadero perdón:
Sabiendo esto, ahora será muy fácil para ti darte cuenta si realmente has sabido perdonar de corazón a otro, o si simplemente lo has hecho “de boca para afuera”.
Y para terminar, quiero darte dos razones bastante fuertes por la cuales deberías perdonar a otro, sin importar lo que te ha hecho o cuánto daño te ha causado:
No sigas haciendo de tu vida, de tu cuerpo y de tu corazón, un cajón lleno de suciedad y mal olor a causa de las emociones negativas. Tu existencia es lo suficientemente valiosa como para desperdiciarla sintiendo rencores e iras que lo único que hacen es ir en detrimento de tu salud, bienestar y felicidad.
Analiza objetivamente las cosas que te pasan, recuerda que aunque sea difícil de aceptarlo, tú eres el responsable hasta de la más mínima cosa que te sucede… ¿Cómo? Por simple atracción.
No olvides nuestra naturaleza como seres humanos, más bien evalúa cada situación y date la oportunidad de racionalizar, antes de dejarte llevar por el emocionalismo 😉