Escrito Por: Katherine Giraldo
Dime…
¿Quién de nosotros no ha soñado con hacer el próximo gran descubrimiento del mundo, o con crear el más revolucionario producto o servicio para la humanidad, o al menos, con encontrar la solución más creativa y brillante para algún problema social que aqueje al mundo en este momento?
El problema, es que la mayoría de las veces, todo esto se queda en sueños… Cuando realmente, podría volverse realidad cada cosa.
Desafortunadamente por estos días, ronda en la sociedad el mito de que algunos nacen creativos y exitosos, y otros simplemente nacen condenados a la mediocridad y el fracaso.
Y claro, hay que reconocer que algunas personas tienen una facilidad natural para plantearse ideas creativas, pero eso no significa que los demás no podamos llegar a convertirnos en personas muy creativas, si desarrollamos la habilidad.
Así que, para acortar el camino hacia la mayor creatividad de nuestras vidas, hoy quiero compartirte 9 sencillos pasos que puedes llevar a cabo, y que te ayudarán a ser verdaderamente ingenioso con tus ideas:
El sueño es la mejor meditación.
— Dalái Lama
El sueño es un estado pasivo, ¿Verdad? Quiero decir, no estás pensando exactamente en la solución de la teoría de la relatividad mientras duermes 😛 Realmente no hay mucho que esté pasando por tu mente (o pues, no que te des cuenta).
Sin embargo, aunque tu cuerpo está en reposo, verdaderamente tu mente sí sigue activa aún en medio del sueño.
Probablemente conozcas que tu cerebro tiene dos hemisferios: el derecho que se encarga de las tareas creativas, y el izquierda que se encarga de la lógica y la resolución de problemas. Pues mientras duermes, pasa algo sorprendente, y es que ambos se unen a procesar la información.
Es por esto que a veces (a lo mejor te ha pasado), te acuestas pensando en algún problema o preocupación que debes resolver, y al rato, te despiertas con la solución en tu cabeza. De hecho, muchos poetas, escritores, cantantes famosos y hasta científicos, han hecho sus mejores obras, mientras se encuentran dormido.
A lo mejor entonces te preguntarás: “¿Entonces basta con dormir para tener una mente super creativa que hasta resuelva mis problemas?”. Y la respuesta es: No.
Son justamente las personas que más se enfocan en ser creativas (o al menos en tratar de serlo) mientras están despiertas, las que son capaces de crear ideas ingeniosas en su cabeza mientras duermen para la resolución de algún problema.
Así que no, holgazanear todo el día y luego tirarte a la cama a dormir, no te hará el próximo Einstein.
Ahora, la acción que debes tomar para llevar a cabo este punto, puede ser la siguiente: Antes de ir a dormir, piensa en un problema que desees resolver y que por más que has pensado en la solución, aún no la has hallado. Con esto, entrenarás a tu mente para que mientras duermas, te ayude a ser creativo en el momento de querer hallar la solución o la salida a las preocupaciones de tu vida.
Si quieres algo que nunca has tenido, debes hacer algo que nunca hayas hecho.
— Anónimo
La empresa Apple no tiene éxitos por hacer nuevos equipos. Ellos hicieron equipos electrónicos innovadores, con una calidad increíble, hermosas fuentes, líneas minimalistas y limpias, e interfaces de usuario intuitivas (por nombrar algunas innovaciones).
¿Cómo Steve Jobs supo hacer eso? Steve Jobs no terminó la universidad… Sin embargo, estaba constantemente aprendiendo. Después de la deserción de las clases formales, tomó un curso de caligrafía. Estudió prácticas meditativas orientales que predican el minimalismo, viajó por Asia, se juntó con gente de todos los orígenes e intereses.
Apple es la confluencia creativa de todas las experiencias de Steve Jobs.
De esta manera, lo que tú debes hacer es abrir tu mente, probar diferentes aficiones. Si siempre haces deporte, entonces puedes intentar aprender un idioma o algo de música. Si por lo general prefieres las cosas intelectuales, probar el surf o la pintura caería bien.
Ponte a prueba y siempre sigue aprendiendo cosas nuevas 😉
La creatividad simplemente consiste en conectar cosas.
— Steve Jobs
Cuando Apple lanzó por primera vez sus computadoras, la gente se sorprendió muchísimo por las hermosas fuentes y las líneas limpias (lo primero se atribuye a la caligrafía y lo segundo a las prácticas orientales minimalistas).
Sin embargo, lo interesante aquí fue como Steve Jobs tuvo la capacidad de conectar las dos cosas, aparentemente dispares. A lo mejor a otra persona jamás se le hubiese ocurrido que juntar éstos dos aprendizajes diferentes, diera como resultado un instrumento electrónico tan valioso, ¿Verdad?
Lo mismo debes aprender a hacer tú… A buscar nuevas maneras de conectar los puntos. Por ejemplo, si eres bueno para la pintura y también dominas el tema de la computación y sus programas de diseño, ¿Qué tal empezar a hacer dibujos en 3D por medio de los programas, y así terminar con una buena imagen, hecha en un excelente programa de diseño?
Cada niño es un artista. El problema es cómo seguir siendo un artista una vez que hemos crecido.
— Pablo Picasso
Los niños son naturalmente buenos para romper las reglas, y pensar fuera de la realidad… Debido a que aún no han sido condicionados para siquiera saber lo que es “la realidad”. Es por esto que ellos tienden a utilizar sus sentidos y a experimentar más libremente cada capítulo que viven.
Cuando tú estés tratando de resolver un problema, intenta imaginar lo que un niño pensaría de ello y cómo resolvería un problema de la misma magnitud.
O si te queda fácil, incluso puedes pedirle ayuda a un niño que conozcas y estar abierto a escuchar lo que se le ocurra para solucionarlo.
En la mente de un principiante hay muchas posibilidades, pero en la de un experto hay pocas.
— Shunryu Suzuki
Esto tiene algo de relación, con tener un espíritu de niño, pero va aún más allá.
Este punto consiste en aprender a ver las cosas aún más rutinarias, como si todos los días fueran nuevas para ti. De esta manera, tendrías la mente abierta y curiosa para imaginarte la realidad.
Por ejemplo, imaginemos una manzana. En la mente de un principiante, una manzana sería simplemente un objeto brillante, rojo y un poco redondo. Él intentaría olerlo, tocarlo, hacerlo rodar, hacerlo rebotar, o hasta martillar con ese objeto… ¿Ves?
Por el contrario, alguien “experto” que sepa lo que es una manzana, no pensaría en algo diferente a lo más normal, que sería comerla.
Entonces, lo que tú debes aprender a hacer, es a imaginarte cosas nuevas aún con lo que ya conoces. Todo puede ser reinterpretado, y tú puedes crear conceptos diferentes (o unir los puntos, como dijimos anteriormente) en base a lo que todos ya conocemos.
Si el agua deriva su lucidez de la quietud, ¿¡Cuánto más las facultades de la mente!?
— Chuang Tzu
La mayoría de las personas hablan de la importancia de deshacerse del desorden físico… Pero nunca hablan de echar a la basura el desorden mental, ¿Cierto?
Mucha gente increíblemente creativa, tenía pocas pertenencias físicas y pocas distracciones mentales, lo cual les permite centrarse con una intensidad igual a la de un láser, en un proyecto o tarea.
Esto es difícil de hacer en el mundo moderno, sin embargo, no imposible. Puedes empezar practicando el enfoque y la dedicación total en una tarea por día. Si estás haciendo el aseo en casa, entonces que nada te interrumpa hasta que termines, ni que algo m´s venga a “atormentar” tu mente con cosas diferentes por hacer. Estás en una cosa, y sólo tienes cabeza para ella.
Cuantas más restricciones se imponen, más se libera a sí mismo.
— Stravinsky
Por lo general, las personas que tienen una limitación o una adversidad frente a sus ojos, son las más creativas para idearse formas de sortear la situación y salir victoriosos.
¿Has visto como algunas personas con algún tipo de discapacidad, son capaces de sorprender al mundo por los talentos que desarrollan? Talentos que a veces hasta son temidos por quienes tienen “todo a su favor” para lograr el éxito en ellos.
Tú puedes aprovechar esta condición mental que nos caracteriza por estos tiempos. Puedes trazarte algún tipo de límite en tu mente, que te obligue a ser creativo para superarlo y salir como un ganador en la situación.
Cuando digo “artista”, me refiero a personas que están construyendo cosas. Algunos con una pluma, otros con una pala, y algunos otros con un pincel”.
— Jackson Pollock
No pienses en hacerlo, Hazlo. Utiliza tus manos y tus sentidos como una manera de conectarte con la tierra y volver a conectarte con los instintos básicos.
Si por ejemplo estás en la oficina, utiliza plastilina o rebota una pelota para desestrezarte. Es sabido que el Presidente Obama suele jugar baloncesto con su jefe de gabinete en la Casa Blanca y ha dicho que esto le ayuda a revitalizarse y re-enfocarse.
Usa tu cuerpo y tus sentidos, ellos te llevarán de vuelta a la diversión más simple y sencilla, y por lo general es de allí donde surge la innovación.
Toma descansos cuando los necesites para relajarte, práctica actividades sensoriales, como jugar la pelota, o practicar la jardinería o incluso hacer garabatos 😉
No aceptes la definición de alguien más para tu vida. Defínete tú mismo.
— Robert Frost
Los genios creativos, son a menudo rebeldes. La mayoría de ellos no han prosperado en las aulas tradicionales, ya que tienden a cuestionarlo todo. Ellos no tienen respuestas memorísticas , sino que buscan que su propia experiencia les de la respuesta por encima de lo que ya se cree.
Un claro ejemplo fue Einstein, quien tuvo largas discusiones con sus maestros. La Madre Teresa se rebeló en contra de la vida tranquila del orden y las “hermanas de Loreto”. Buda alcanzó la iluminación, pero a menudo le pedía a las personas que pusieran en duda incluso sus propias enseñanzas y la experiencia de su propia verdad.
Lo mismo debes hacer tú, cuestionar las cosas. No asumas que porque alguien más arriba lo dijo, esa es la única o la mejor manera de hacer algo. Míralo desde tu propia perspectiva. Prueba otras soluciones.
Finalmente, no hay nada que perder intentando ser diferente… Por el contrario, ¡Hay mucho que ganar!
Y bueno, ahora cuentas con un grandioso equipaje rumbo a la máxima creatividad de tu vida. Espero que todo esto realmente te sirva, tanto como me está sirviendo a mí 🙂