Escrito Por: Katherine Giraldo
Lamento tener que ser yo quien te lo diga pero: TE MINTIERON.
NO existen las críticas constructivas. Y si quieres saber por qué, sigue leyendo 😉
¿Has oído hablar de los Criticantes Expertos?
Sí, aquellos que se encargan de hablar (usualmente mal) sobre cosas, personas, empresas, etc; sin realmente contar con un conocimiento holístico de las situaciones y experiencias.
Son esos a los que les escuchas decir cosas como: “Los ricos son las personas más egoístas y ávaras, por eso no tengo amistades de ese tipo”.
Y por si fuera poco, por lo regular, estas personas caen además de todo en la hipocresía.
Nota Importante: La hipocresía no es lo que comúnmente se cree. La mayoría de las personas, considera la hipocresía como el ser “de doble cara”, que mientras dice amar a su pareja, le está jurando amor eterno a otras 10 personas más. La hipocresía en su más pura esencia, consiste simplemente en Predicar y No Aplicar.
Entonces, éstas personas se encargan de criticar a otros lo que en sí mismos, no se encuentra presente. Y es aquí donde la crítica, yace a flor de piel.
Veamos entonces el concepto de crítica: Criticar es realmente opinar sin fundamentos… Algo MUY diferente a juzgar.
Cuando se Juzga, existe algo clave: OBJETIVIDAD.
Sin embargo, las críticas, siempre están basadas en puntos de vista subjetivos, y son en sí mismas conceptos destructivos como tal.
Por lo tanto, no pueden llegar a ser constructivas, siendo destructivas simultáneamente.
La base de la constructividad, es el apoyo y el deseo por la mejora constante de ambas partes (Kaizen).
Mientras que la base de críticar, es el resaltar en otros lo que considera estar mal, bajo su propia perspectiva y que subconscientemente, encuentran en ellos mismos… Todo para obtener un beneficio propio, tal como aumentar el ego y creerse con autoridad y superioridad en aspectos que ni conoce.
Hay personas que critican a otras bajo una primera impresión, que se basan en paradigmas tales como “dime con quién andas y te diré quién eres”.
De aquí, justamente se provocan sentimientos como el rechazo y la discriminación sin fundamentos.
Un ejemplo que se me vienen a la cabeza con todo esto, es la habladuría de aquellas personas que se creen expertas en avances tecnológicos, y que se atrevieron a criticar la empresa Apple en su lanzamiento del iPad en 2010, alegando que se encontraban ante otro fracaso empresarial más.
Algo que para estos tiempos, ya son palabras absolutamente destruidas por el majestuoso e indudable éxito de esta empresa.
Entonces, los criticantes expertos, no son más que personas con la necesidad de destacarse en la mente de otros, como “pensadores revolucionarios”, pero que en realidad no pasan de ser simples personajes con la mentalidad lo suficientemente cerrada como para lanzar opiniones subjetivas y destructivas sobre otros.
Por supuesto, estoy segura de que conoces a muchos de ellos, y lo mejor de todo, estoy segura de que conoces la clave para no caer tan bajo.
¿No la conoces?
Ok, te la diré por si acaso 😉 : La búsqueda de fundamentos sólidos y la argumentación estructurada en bases fuertemente objetivas.